“Recuerda, recuerda, el cinco de noviembre, la traición de la pólvora y el complot. No hay por qué tal traición, jamás se ha de olvidar.”
La máscara de Guy Fawkes que utilizan los voceros de Anonymous se ha convertido en un referente de la lucha por la libertad de expresión. Su historia y lo que hay detrás de ella se remonta a cuatro siglos atrás; pero, sobre todo, a una historieta llamada V for Vendetta. Desde hace tres décadas el cómic se ha convertido en una de las lecturas más populares, especialmente desde el estreno de la película basada en ellos, protagonizada por Natalie Portman en 2007.
En los últimos meses, años, la figura de V se ha convertido en una imagen viral, omnipresente a través de los canales de comunicación, al ser retomado como emblema del grupo de protesta Anonymous, quienes no sólo se cubren con su rostro y lo convierten en su símbolo, sino que igualmente retoman su manera de irrumpir en los medios y romper con candados gubernamentales a través de la tecnología haciendo de la subversión una manera de comunicar lo que comúnmente es poco probable escuchar en los canales corrientes y permitidos.
Al establecer poco más de quince años en el futuro la historia de V for Vendetta (iniciada en 1981, y desarrollada entre 1997 y 1998), más que predecir, se aleja del presenta para examinarlo —junto con sus posibles consecuencias— sin tanto riesgo y temor. En la trama, gran parte del mundo ha pasado ya por una hecatombe nuclear, y el Reino Unido ha logrado sobrevivir como un estado totalitario, en el que la sociedad se organiza en familias bien definidas, donde la diversidad de pensamiento, actitudes y deseos han sido exterminados en campos de concentración y su reincidencia se combate con una policía bien definida y efectiva en su naturaleza represora.
En medio de ese terrorismo emocional aparece V, un personaje de genio casi diabólico que utiliza y mezcla herramientas tanto del teatro como de la filosofía, el anarquismo y lo considerado como terrorismo. V comienza una revolución de uno solo contra todo un sistema, en un intento por despertar a una sociedad comatosa y amputada.
En V for Vendetta se tocan temas como la manipulación de los medos de información en pro de los intereses del gobierno, la silenciación violenta y la persecusión, técnicas utilizadas por todos los gobiernos en mayor o menos medida para mantener el control.
Si bien la sociedad mexicana no se encuentra en un estado de represión tan grave como el de la película, si enfrenta serios problemas referentes al ejercicio de la libertad de expresión.
Más de 700 periodistas han muerto en los últimos 10 años por ejercer su trabajo, informó la ONU con motivo del Día Internacional para terminar con la Impunidad de los Crímenes contra Periodistas
De acuerdo con un informe de la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), México es el país más peligroso para ejercer el periodismo en América, pues uno de cada tres asesinatos documentados de 2010 a la fecha se cometieron en este país.
Además, según datos del Primer Encuentro Nacional por los Presos Políticos, alrededor de 500 mexicanos se encuentran presos o perseguidos por defender sus derechos e ideales.
Fuente: Confabulario
Dentro de la trama, se ha
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