Integrantes de la policía comunitaria de esta comunidad mantienen vigiladas las entradas y salidas del lugar, tras el secuestro masivo de personas ocurrido la tarde del viernes en esta zona minera del municipio de Cocula.
Informaron que al menos 18 personas habrían sido privadas ilegalmente de su libertad por un comando que instaló un retén de las 17:00 a las 18:00 horas en el crucero que conduce al poblado de Olea, sobre el tramo carretero Nuevo Balsas-Cocula.
Al respecto, precisaron que 12 de las víctimas son trabajadores de contratistas de la minera Media Luna; cuatro del poblado La Fundición y dos más de Nuevo Balsas.
Los habitantes de este lugar que permanecen desaparecidos son: Arlet Evelin Inés Ríos, de 28 años y Pedro Villalobos Tabares, de 32.
Ambos viajaban en un vehículo de transporte público que se desplazaba de Iguala a la comunidad de Nuevo Balsas, indicaron.
Los pobladores responsabilizaron de esta acción criminal a Uriel Wences Delgado La Burra, un operador del grupo delictivo La Familia, que fue expulsado por la guardia comunitaria desde diciembre de 2013 cuando los habitantes de este lugar decidieron tomar las armas para enfrentar directamente la delincuencia.
Recordaron que hace cinco años La Burra se robó al menos siete camionetas de la minera Media Luna y de esta forma presionó a los directivos para que le entregaran una cuota mensual.
A cambio de ello, La Burra ordenó rotular las camionetas de la minera y los contratistas de la empresa para no molestarlos porque ya estaban pagando a La Familia, banda delincuencial que mantiene una disputa con Guerreros Unidos por este corredor minero y de droga.
Los guardias comunitarios permanecen en alerta máxima ante el regreso del operador de La Familia y advierten que en caso de que las autoridades no intervengan en la liberación de las personas retenidas, ellos mismos van a salir a cazar a La Burra.
Tomado de Proceso
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