El ataque ocurrió un día después de que el funcionario acusado fue inhabilitado de su cargo
La víctima consideró que la balacera está relacionada con su denuncia
La madrugada de este martes, en la ciudad de León, hombres armados balearon la vivienda de una mujer que denunció que fue víctima de acoso sexual por parte del director del centros penitenciario de Guanajuato, Víctor Hugo Resendes Macías.
El ataque ocurrió un día después de que Resendes Macías fue inhabilitado por un año para ejercer cualquier cargo público, tras haberse acreditado la agresión sexual de la que fue acusado por una médico del Cereso de León.
De acuerdo con los primeros reportes, aproximadamente a las 4 de la mañana del día de ayer, varios sujetos irrumpieron en el inmueble, ubicado en las inmediaciones de la comunidad de Santa Ana del Conde, donde se encontraba la pareja de la víctima y balearon la puerta.
Cuando la doctora denunciante regresó a su hogar, acudió de inmediato a las instalaciones del Ministerio Público acompañada de su pareja, quien se desempeñaba como jefe de custodios en el Cereso de León, a interponer una demanda penal por los hechos.
Al acudir al domicilio de las víctimas, un perito comprobó que la puerta de entrada estaba baleada, el marco dañado, así como una malla, por donde se presume los agresores escaparon, quienes durante el ataque le gritaron a la pareja de la mujer: “Tú mejor ni salgas comandante”.
El jefe de custodios resultó ileso gracias a que se escondió entre una lavadora y una mesa, mientras escuchaba como intentaban abrir la puerta, pero como no lo lograron realizaron varios disparos y se dieron a la fuga.
En Octubre del 2017, cuatro funcionarios de alto nivel de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado se vieron involucrados en un caso de abuso sexual y acoso laboral contra la trabajadora.
La denuncia fue canalizada a la Procuraduría de los Derechos Humanos del Estado de Guanajuato (Pdheg), la cual se limitó a dar recomendaciones de carácter administrativo y no penales, pese a que se trató de un delito grave.
Por lo anterior, ambos trabajadores tuvieron que renunciar tras presiones de Resendes Macías, quien además fue señalado como el principal acosador de la mujer, situación que inició en 2015 cuando ella inició su labor en el Cereso, pero fue hasta el año pasado cuando se acreditó el hostigamiento.
Cabe destacar que los agresores sexuales de la mujer fueron cuatro, hecho que tiene desconcertada a la víctima, quien no quiso hacer señalamientos directos, sin embargo, refirió que todos sabían dónde vivía ella.
La mujer también expresó su preocupación por el ataque armado, al que consideró una amenaza por la denuncia que hizo contra los funcionarios.
Con información de SinEmbargo
Sé parte de la conversación