
Hizo una carta antes de acabar con su vida
En ella expresó cómo lo acosaban en el colegio y cómo la institución no hizo nada para evitarlo, por el contrario, un maestro lo humillaba
Daniel Fitzpatrick, de 13 años, relató en una carta el acoso que sufrió de varios compañeros de su colegio y la falta de atención en el asunto por parte de casi todos los profesores y la directora del centro, localizado en un barrio de Brooklyn, Nueva York, Estados Unidos.
El texto fue escrito a mano en una hoja de cuaderno que la familia Fitzpatrick hizo pública tras el fallecimiento del menor el pasado jueves.
Danny, como le decía su familia, fue hallado sin vida en el ático de su casa en Staten Island por una de sus hermanas. “El adolescente se suicidó superado por el tormento”, afirmaron sus padres al diario Daily News.
“Me rendí. Los profesores no hicieron nada”, expresó el menor. En esas líneas Danny ponía nombre a los compañeros que le hicieron bullying y como acabó peleándose con uno ellos. Al final, Danny terminó con el meñique roto.
“Me acosaron y lo hicieron constantemente”, escribió el menor en el texto.
“Mrs. Goldrick [la directora] no hizo nada”, puntualizó Danny que describió con palabras cariñosas a Ms. D’Alora “la mejor profesora. Ella me comprendió e hizo algo, pero no duró mucho”.
El padre se desahogó en las redes sociales. Envió un mensaje a los padres “de los chicos que atormentaron a mi hijo” y los que calificó de “pequeños monstruos asquerosos”.
Según explicaron los padres al Daily News, Danny era acosado en la clase de gimnasia y fue humillado en clase por un maestro. “Decía que tenía miedo de sus profesores”, recordó Maureen Fitzpatrick, la madre del adolescente.
La familia Fitzpatrick puso en marcha el pasado viernes una colecta online para recaudar 10, 000 dólares y darle a su hijo el funeral que se merece.
Este domingo los fondos provenientes de más de 1,900 personas ascendían a casi 77,000 dólares. Algunos donativos han ido acompañados de condolencias y de mensajes para prevenir el acoso y el suicidio. También hay quienes reclaman algún tipo de sanción para los responsables del centro.
Fuente: EL MUNDO
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