Los homosexuales deben ganar la gracia de Dios viviendo “en continencia y castidad”. Pues quien esté libre de pecado que tire la primera piedra…
La Iglesia está dispuesta a acoger y ayudar a aquellos homosexuales que reconozcan que tienen una desviación
La Arquidiócesis primada de México reitera su rechazo a la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo así como a su derecho a adoptar hijos.
De acuerdo con el reciente editorial de su semanario Desde la fe, titulado “¿Por qué la Iglesia se opone a la iniciativa del Presidente que promueve el ‘matrimonio igualitario’?”, la homosexualidad “es una desviación” que termina por alejar a los creyentes de Dios.
Menciona que las relaciones homosexuales fueron rechazadas por el apóstol San Pablo porque van “contra la naturaleza” y son una “infamia de hombre con hombre”, y advierte que “ni los afeminados, ni los homosexuales… heredarán el Reino de Dios”.
La publicación asegura que aunque la propuesta haya provenido del presidente Enrique Peña Nieto, esta no elimina el pecado: “Que el Estado vuelva algo legal no lo hace moral”.
Desde la fe manifiesta la voluntad de la Iglesia para ayudar a aquellos que reconozcan que tienen una desviación, pues la Iglesia Católica “considera pecado grave la relación sexual homosexual”, por lo que exhorta a todos los homosexuales ganar la gracia de Dios viviendo “en continencia y castidad”.
Fuente: Proceso.
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