México se encuentra entre los países que están en riesgo de sufrir una crisis de escasez de agua para el año 2040 en porcentajes que podrían alcanzar hasta un 80 por ciento, de acuerdo con un estudio del Instituto de Recursos Mundiales .
De acuerdo con el Instituto de Recursos Mundiales se espera que el cambio climático haga algunas zonas más secas y otras más húmedas. “Mientras las precipitaciones extremas aumenten en algunas regiones, las comunidades afectadas se enfrentaran a mayores amenazas de sequías e inundaciones”, dice el reporte.
El informe encontró que 33 países enfrentarán un estrés hídrico extremadamente alto en 2040. México ocupa el lugar número 34 de 167, detrás de Túnez, y se prevé que enfrente altos niveles de escasez de agua con porcentajes de entre un 40 hasta un 80 por ciento.
El estudio detalla que una clase media emergente en el mundo podría clamar por una mayor producción de alimentos y de generación de electricidad de alto consumo de agua.
Sin embargo, “no es claro de dónde vendrá toda esa agua”.
El documento dice que se debe tener en cuenta la incertidumbre inherente en la estimación de las futuras condiciones, en particular las asociadas con el cambio climático, la población futura y las tendencias económicas y la demanda del agua.
La disminución de los recursos hídricos y las malas administraciones han obligado a 1.5 millones de personas, principalmente agricultores y pastores, a perder sus medios de vida y dejar su tierra, trasladarse a las zonas urbanas, y magnificar la desestabilización general de los países, especialmente en zonas como el Medio Oriente.
En México, el Colegio de Postgraduados informó recientemente que 15 millones de personas no cuentan con agua en sus domicilios “y es fundamental para su vida, su salud y su desarrollo”.
Mientras que en el campo, la falta del vital líquido ha dejado graves daños en distintos estados como Guerrero, donde la falta de lluvia provocó la muerte de 3 mil 400 cabezas de ganado en los últimos seis meses, según Atalo Niño Ramírez presidente de la Unión Ganadera Regional la entidad.
En seis meses, murieron mil 200 cabezas de ganado, por sequía y enfermedades, en la región de la Costa Grande; 800 en Costa Chica; 400 en Tierra Caliente; 280 en la zona centro; 450 en la zona norte; 185 en la región de la Montaña y 85 en Acapulco.
Añadió que los estragos de estas sequía se verán cuando terminen las lluvias, a partir de noviembre; el pasto tampoco ha crecido, y aunque llueva no va crecer como debe. “Se va a poner difícil la situación con la sequía”, expuso.
Ante este panorama de escasez de agua en todo el mundo los gobiernos nacionales y locales deben presentar fuertes planes de acción sobre el cambio climático y apoyar un fuerte acuerdo internacional sobre el tema.
“Los gobiernos deben también responder a las prácticas de manejo y conservación que ayudarán a proteger los recursos hídricos sostenibles esenciales para los próximos años”, concluye el documento del Instituto de Recursos Mundiales.
Por su parte, Niño Ramírez también exige acción gubernamental a corto plazo: “Demandó una estrategia gubernamental en contra la sequía; que apoye con semilla de sorgo, maíz híbrido y fertilizante para enfrentar los meses que viene, debido a que por la sequía no hay cosecha.”
Fuente: Sin Embargo
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